Comienzos de Agosto. Enfundados con el traje típico Canario, y elegido para la ocasión, bien vestidos: El sombrero, la mantilla, el fajín, el chaleco, el pañuelo, las polainas, con los zurrones llenos de gofio, la bota con un buen vino de la zona, la talega repleta de víveres; papas, costillas, mojo, y los instrumentos bien afinados; la pandereta, la bandurria, la guitarra, el timple, el acordeón, con la compañía de amigos, vecinos, familia, foráneos; ratifican pues, estar todo dispuesto para comenzar «La Romería del Poleo«, en honor a «La Virgen del Amparo«.
Suena el tajaraste. ‘La banda del Poleo‘, con sus compases pegadizos, armoniosos y sencillos se abre paso por todo el barrio.
El eco de los tambores, la flauta, las chácaras, el acordeón, envuelven las casas y cada uno de los rincones de las medianías del municipio, con más fuerzas si cabe en el barrio del Amparo
A medida que van caminando, el grupo, en un principio ‘organizado’, ‘deja de serlo’, los vecinos se unen a la fiesta y juntos bailan el ‘Tajaraste’. Baile aborigen, que suena una y otra vez […] Mientras otros, repiten el emblemático, conocido y pegadizo estribillo que lo acompaña con los instrumentos tradicionales.
– ¡Pá la Vega!–
– ¡Pál Amparo!– […]
Los vecinos y peregrinos, concentrados en la plaza del barrio con sus vehículos; camiones, furgonetas, coches, pibas, adornados tan especialmente para la ocasión con las ramas, las hojas de palma y el poleo. A la guía para el camino de voladores y el repique continuado de las campanas de la iglesia, y al compás de estos acordes, danzan en su partida nocturna hacia el monte, en busca de la hierba preciada.
Comienzan a subir -De el Lance a la Montaña de Arenas Negras- para coger el poleo. Encargado ésta de marcar el inicio de las fiestas en honor a «La Virgen del Amparo», y con el que a su bajada, a la mañana siguiente, los vecinos decorarán las calles del barrio y el pórtico de la iglesia; hasta que finalicen los días de celebraciones.
De la misma manera, las ramas del poleo serán esparcidas alegremente por todo el suelo de las calles, pues de esta manera, con el aroma ambientar y animar a las gentes a no parar en ‘La danza del Tajaraste‘.
El aroma del poleo, ése elemento esencial y significativo de las fiestas.
Y es que a pesar de que el día grande de las fiestas en honor a nuestra Señora «La Virgen del Amparo«, corresponde al 5 de Agosto, las gentes del lugar ya han comenzado a dar rienda suelta a las celebraciones anheladas. Habiendo tenido que esperar con ansias en que transcurriesen los 365 días pertinentes, para desde este día empezar a rendir honores a su Virgen poderosa.
Días estos intensos, en los que su virgen, toma mayor notoriedad, ya que se convierte en la principal protagonista de los actos del barrio; religiosos, culturales, lúdicos, deportivos, y tradicionales.
Y es que a la virgen del Amparo se la adora. Tiene poderío, enganche […]
El barrio durante estos días se verá embargado de sensaciones y nostalgias, con los que mostraran a todo el mundo su pasión, respeto y fervor por su patrona; madre y reina protectora «La Virgen Del Amparo». La que además, sustenta desde el año 2000 el título de Alcaldesa Honoraria y Perpetua del municipio icodense.
Todo un orgullo para las gentes del Amparo. Ahí es nada.
Orgullo, que queda reflejado en cada acto, cada cual con un valor considerable, y que para las gentes del Amparo guarda su imagen.
Y es que tener a su máxima representación municipal tan cerca, tan suya, haciendo compañía y ofreciendo protección; debe ser sin duda toda una satisfacción.
De unos años para acá, se ha retomado una tradición popular.
Con origen de antaño, a la peregrinación, de los romeros cuando iban cargados con cestos repletos de comida hasta la posada de la virgen.
Hoy esta tradición, se ha recuperado con gran participación.
Consiste en encontrarse y unirse las gentes del pueblo con las gentes del barrio del Amparo.
Los primeros, parten danzando a media tarde al son del tajaraste y música canaria, desde el corazón de Icod, ‘La Plaza de San Marcos’, danzando y danzando, con cintas de colores, varas. Sin prisas, pero sin pausa, al ritmo del tajaraste, suben y suben la empinada calle por la que hay que pasar, y así llegar al otro barrio del municipio; ‘San Antonio’, lugar intermedio de la subida, en el que unos y otros, desde la comisión de fiestas, lo marcan como punto de encuentro.
Seguidamente, juntos en danza, cánticos y brindis, parten de ahí para llegar hasta la iglesia del Amparo, en armonía y comunión.
Mientras avanzan, cada vez más como si una piedra de imán fuese, se van uniendo gentes de todas partes.
Unos cantan, otros bailan, comen, beben; la alegría y el buen ambiente se palpa por cada palmo. […]
A la llegada, con la virgen en el exterior, presidiendo la entrada al barrio y como excelente anfitriona va recibiendo a los peregrinos que se van concentrando a las afueras de su pórtico, mientras danzan y bailan con emoción delante de ella; al tiempo uno a uno, peregrinan delante de la imagen, besando su manto como manifestación de ofrenda, ruego, respeto y gratitud.
Antigua y bella tradición ésta desde hace cientos de años […] Desde la época de los aborígenes a la que las gentes del Amparo, con su empeño y preocupación por no perder los recuerdos y raíces del pasado, ponen toda la carne en el asador, para no desaparezcan así estos emblemáticos actos festivos en honor a su patrona.
Las fiestas del Amparo son históricas e incondicionales. Sus tradiciones e historias sobrepasan todo carácter de espectáculo.
Las gentes del Amparo, no dejan ni quieren se pierdan. Han sabido mantener vivas sus tradiciones y costumbres durante siglos.
Para ello han combinado lo de ayer con lo de hoy, lo tradicional con lo popular; y es que en el Amparo, ambas van de la mano.
Las fiestas, van acompañadas de otros actos culturales y populares, las entrañables comedias, los cestos de frutas, las loas -‘poesías, versos cantados’-, las verbenas, exposiciones, muestra de su agricultura, etcétera, etcétera.
Todo un ejemplo de identidad cultural que manifiestan con fuerza durante estos días de celebraciones en el barrio.
La iglesia del Amparo tiene un valor histórico incalculable. Su construcción, data de ‘finales del siglo XVI‘; con un particular estilo estructural, ya que, la parte exterior techada de la iglesia destaca por su forma de «media naranja».
La vista desde el exterior no deja impasible ni pasa desapercibida. Su sobriedad no deja indiferente a nadie. Verla allí, tan solemnemente en su retablo es una maravilla, impresiona. Las emociones brotan sin buscarlas […]
Como datos históricos y significativos, casi como una historia de película, cabe reseñar que ‘La Virgen del Amparo’ está considerada como una ‘virgen milagrosa’, y es que, se le atribuyen ciertos milagros. […]
Oficialmente se le han reconocido varios hechos milagrosos, frutos ellos de buenas cosechas, ganados fértiles, así como curaciones milagrosas […]
Según relatan, corría el mes de Abril del año 1752, cuando una fuerte tormenta azoto el barrio, originando movimientos en el terreno; por lo que ante la desesperación y el miedo de los vecinos por aquellos instantes, -dicen- que no pararon incesantemente de rogar a su virgen para que los protegiese, y por tanto, no ocurriera desgracia alguna, hecho que así sucedió. La tormenta se calmó sin consecuencias negativas. No hubo hechos que lamentar.
Fue desde entonces, cuando con motivo de agradecimiento se comenzaron a dar peregrinaciones constantes hasta la ermita en la que descansaba la imagen.
Junto a ella, la devoción y petición de favores a la virgen desde ese instante no paró, hasta la actualidad.
A la tradición de la búsqueda del Poleo -según cuentan- comenzó cuando un vecino del barrio, estando en el frente de la «Batalla del Ebro», allá por la ‘Guerra Civil Española’ pidió protección, y prometió a su virgen, que si salía sano del enfrentamiento bélico, no dejaría nunca de ir a adornarla cada agosto, con esta aromática hierba; ‘La rama del Poleo’. -Y así hizo-. Siempre en compañía de su bandera, la que lo acompaño durante la batalla […]
– ¡Pá la Vega!-
– ¡Pál Amparo!- […]
Acabara éste día, las fiestas en honor a la ‘Virgen del Amparo’ continúan, el traje hoy, será guardado para una próxima celebración; el zurrón vacio regresa a su descansadero, sin víveres en la talega, con los instrumentos echando humo, la garganta quebrada de las continuas alabanzas y ruegos a la virgen, las piernas y el cuerpo agotados de tanto danzar. El sentimiento de felicidad embarga y hace menor la pena de recogerse […] Hasta un próximo día.
El aroma del poleo, entre manos y pies […]
-¡Viva la virgen del Amparo! […] -¡Viva!-
-¡Viva la virgen del Amparo! […] -¡Viva!-
-¡Viva la virgen del Amparo! […] -¡Viva!-
La Virgen del Amparo nos espera en su Santuario, en las medianías del barrio del Amparo […]
Para que luego digan que no hay cosas en común entre, antes y ahora. Se viven tan apasionadas. 😉
¿Se están toda la noche en el monte?
Sí, toda la noche. Suben y luego, a la mañana siguiente bajan tod@s juntos, como en una caravana, en romería, tocando las pitas (bocinas coches), recorren todo el municipio, con música canaria, vivas… Y así durante la mañana, a la bajada de la rama; repartiendo la hierba de poleo a todo el mundo; una manera más de hacer partícipe a tod@s de las fiesta y celebración de la virgen.
Al acabar el recorrido de costumbre, regresan a su barrio -el Amparo-, y allí comienza el enrame de la plaza, calles, iglesia, etc.
El olor a poleo se queda por todo los sitios donde pasan. Es como, un guía del camino.
Me gusta, te gusten estas cosas 😉
[…] ya ocurriera semanas pasadas por el barrio del Amparo, es el turno ésta del barrio de Santa Bárbara. Pueden parecer ser iguales, pero como los hijos, […]
[…] Desde el amparo, a pie, descienden y bailan el tajaraste, aromatizando por donde pasan como al buen caldo, atizan el poleo, que tras su recogida en el monte lo bajan al barrio, adornando calles e iglesia, cada día previo a la festividad de su patrón. Un baile aquí, allá… ‘’pal’ amparo’’, pa‘ la vega, de un dance a otro; a un lado, a otro, avanzan calle adentro alegremente… Los coches recorren todo el municipio, haciendo participes a todos de este especial día. […]