La ausencia no es sólo ausencia. Aunque la sensación de tu ausencia haga que sienta tantas cosas en el estómago, y tantos nudos en la garganta que parecen los ojos son unas cataratas; tengo la sensación de que estás más cerquita de lo que percibo por esa necesidad que tengo de tenerte mucho más cerquita.
Siento tu ausencia: Porque no estás, no te veo, no te leo, no te escucho, no te siento, no te huelo… Tu ausencia, amén de tantas emociones y sentimientos, me dicen que, aún así, te siento cerquita en mi corazón; así lo hago, aunque quisiera que estuvieras, quisiera leerte, escucharte, leerte, sentirte, olerte…
Me doy cuenta con estas pretensiones que mis necesidades de que estés no han pasado desde que te conozco, y siendo sincera con mi propio corazón, quiero que estas necesidades no acaben nunca. Así sé que nuestra amistad y afecto sigue viva… Eres más presencia que ausencia.
Cuando siento la ausuencia de los seres que quiero, por dentro me parece estar hueco y no lo puedo evitar, y al leerte he pensado sobre ello, y me fascina tus palabras.
Nunca he tenido alguien que quiero lejos, y si lo tuviera no sé como reaccionaría lo que si no dudo es que quiero tenerles cerca por siempre. debe sufrirse.
David: He de confesarte que me sucede también, cuando por cualquier motivo siento ausencia, o lejanía de la gente que quiero, el corazón me llora, y no puedo evitarlo. Pienso que la vida es para compartirla a cada instante, y si por su ausencia y cualquier circunstancia no se puede, me asalta la melancolía, por eso exprimo cada ocasión.
Alba: Te aseguro que la impotencia de no poder darles un abrazo, mirarle a los ojos, o dar un paseo, o un ratito de charla cara a cara, es durillo.