No vuelvas a permitir que tu corazón se sienta apesadumbrado. El entusiasmo que recibes será tan obvio que lo manifestarás abiertamente. Disfruta de cada segundo de la vida. Otro instante obvio que no se trata de cualquier experiencia para que la apartes del mismo modo arrinconas una piedra en el camino: «canta», «ríe» «sueña», «quiere», «corre», «emociónate», «diviértete con tus amigos y familia» «juega», «lee». Empápate de la compañía que verdaderamente colma de dicha tu cuerpo y tu mente.
Las obviedades también deben de hacerse realidad. Permite a tu corazón habitar gozoso en ti.
Leave A Comment