Crezco, crezco y crezco, miro, miro y miro… Cada hecho que crece, que miro, y que vivo, hacen que un sentimiento incontrolable quieran buscarte, y siento como crece, y siento que lo vivo; de verdad crece y vive en mí.
Cada instante, siempre que te siento aún lejos o cerca, el afecto por tí crece, y cada palabra, mirada, regaño, apoyo, reconciliación, duda e ilusión, es un regalo eterno que me das, y jamás muere, jamás.
Bien sabes las mil emociones que viven en mí, porque también crecen, las miras, y las vives en ti.
Eternamente, el afecto nunca muere.
También espero el amor dure hasta la eternidad. Una vez más, lo has bordado aranchis
Hubo veces que creí el amor era una mentira, con el tiempo he aprendido a verlo.
Alguna vez te lo he dicho, me ayuda mucho leerte. Después de un largo y duro día, me has devuelto a la cordura. Muchas gracias arancha, sigue para siempre deleitando con tus palabras, y pensamientos.
Contigo es hiper imposible muera nada, y muchísimo menos el cariño de nadie. Eres un ejemplo.
Ciertamente, nunca podra morir el amor. Y que no pase nnca que sino estamos perdidos entre guerras, y odios.
David: Amén. Yo también espero que el cariño dure eternamente. 😉
Cristi: Creo que creemos en eso cuando nos ha llegado a lo más profundo de nuestro ser, una desilusión. Da igual que sea de familia, amigos, pareja…
Edgar: Si algo logré con estas palabras, me emociona saberlo; gracias sinceras, y no dudes que el afecto no muere si no muere en uno mismo.
Yosef: Madre, me van a poner más que coloráa je, je, je 🙂 😉
Alba: Lo has resumido perfectamente: sin amor, sólo existiría odios y rencores, y creo que ya vamos sobrados, sino, mirar como la gente anda a la greña todo el día. Dando zancadillas a ver quién es más fuerte y quién queda mejor. Y me parece deleznable.